A la hora de contratar un seguro de coche pueden ser muchas las preguntas que puedes plantearte, como por ejemplo si se puede llevar a cabo la contratación sin haber pasado la ITV. Pues bien, lo primero que debes saber es que tener la ITV y el seguro de coche en regla son dos de las principales obligaciones de un conductor. Ambas son documentaciones que exige la normativa para poder circular por la carretera. Por lo tanto, si no las tienes o si las tienes caducadas, podrías enfrentarte a una multa.
Circular sin seguro y/o sin ITV: posible sanción
Ante la pregunta de si es posible circular sin seguro, la respuesta es clara: no. Tal y como establece la normativa, los propietarios de los vehículos a motor cuyo estacionamiento habitual esté en España, están obligados a contratar un seguro que cubra la responsabilidad civil hasta la cuantía de los límites del aseguramiento obligatorio. Conducir sin seguro no es legal, y hacerlo puede conllevar una multa de tráfico de entre 601 y 3.005 euros. Además, en los casos más graves se puede proceder con la inmovilización del vehículo. La cuantía de la multa depende de un amplio abanico de factores: categoría del vehículo, si presta algún servicio, si se ha visto implicado en un accidente…
Circular sin la ITV en vigor también puede suponer una multa de entre 200 y 500 euros. En España es obligatorio tener la ficha de la Inspección Técnica de Vehículos al día para poder circular. Más allá de la sanción económica, hay que tener muy en cuenta la seguridad. Cuando un vehículo circula sin ITV puede tener algún problema que ponga en serio riesgo la seguridad víal.
En relación a la ITV, si se produce un accidente, la compañía aseguradora puede negarse a pagar los daños propios si el vehículo no la tiene en vigor. Si además los peritos averiguan que el accidente se ha dado por un fallo que debería haber sido solucionado ante una Inspección desfavorable, puede reclamar los gastos ocasionados por los daños a terceros.
Contratar un seguro de coche sin ITV
Una de las situaciones que se da más frecuentemente es la de un propietario que necesita contratar un seguro para vender un coche que tiene inmovilizado en su garaje y dado de baja. Para poder llevar a cabo la operación de compraventa es obligatorio que el vehículo esté dado de alta y haya pasado la ITV. En este caso se puede contratar un seguro temporal para pasar la Inspección Técnica de Vehículos. También conocido como seguro por días, se trata de una póliza temporal para poder pasar con ella la ITV y así vender el coche.
Este tipo de seguros temporales exigen que el conductor tenga más de 21 años y esté en posesión de su carnet de conducir desde hace al menos un año. En líneas generales, las coberturas que ofrece un seguro temporal son exactamente las mismas que las de un seguro al uso. La única diferencia entre ellos es el periodo de tiempo durante el cual están vigentes las coberturas.
Lo más importante es que cubren la Responsabilidad Civil Obligatoria. Es decir, los daños se pueden causar a terceros, tanto materiales como personales. Además de las coberturas básicas se pueden contratar otras adicionales, como la defensa jurídica si surge cualquier tipo de conflicto legal o la asistencia en viaje.
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