Si estás embarazada y tienes un seguro de salud familiar, seguro que te interesa incluir todos los cuidados del bebé en la póliza. Para poder tener asistencia privada en el parto tendrás que haber contratado el seguro de salud como mínimo 8 meses antes del embarazo. Se trata del periodo de carencia común, en el que las coberturas permanecen inactivas. De esta forma, tendrás incluidos todos los cuidados del embarazo, así como el nacimiento de tu hijo. Por lo tanto, si todavía no has contratado un seguro de salud y estás planteando quedarte embarazada, hazte con una buena póliza lo antes posible.
Una de las coberturas más interesantes del seguro de salud en relación el bebé tiene que ver con sus primeras 24 horas de vida. Después del nacimiento, el primer día de hospital del más pequeño está cubierto. Si lo aseguras de inmediato, los periodos de carencia quedarán eliminados con una simple llamada de teléfono.
Hasta los 14 años tu hijo necesitará una serie de atenciones específicas para niños y adolescentes. No hay que olvidar que los niños son mucho más propensos a enfermedades que los adultos. Merece la pena incluirlos en el seguro de salud familiar para que un profesional de pediatría se ocupe de cuidar su salud.
Como puedes comprobar, añadir a tu bebé al seguro de salud familiar realmente merece la pena. Actualmente, cada vez son más los españoles que apuestan por contratar una póliza de este tipo. Además, a día de hoy las compañías aseguradoras, además de las coberturas básicas, ofrecen una serie de coberturas adicionales, que puedes contratar de forma voluntaria para tener un seguro 100% adaptado a tus necesidades, y a las de tu familia.
¿Cuáles son las ventajas de tener un seguro médico?
Si todavía no tienes tu seguro de salud, seguro que te interesa conocer cuáles son las principales ventajas que te ofrece. No te preocupes porque es compatible con la sanidad pública. Es decir, tener un seguro médico no es incompatible con acudir a la Seguridad Social.
Una de las grandes ventajas de tener un seguro de salud privado tiene que ver con la rapidez y la agilidad. Actualmente, la gran mayoría de centros sanitarios privados tienen listas de esperas muy largas, tanto para pruebas diagnósticas como para terapias e intervenciones quirúrgicas. En cambio, la sanidad privada te ofrece tiempos de espera mucho más reducidos. Seguro que si tu hijo está enfermo y el médico recomienda la realización de una serie de pruebas, te interesa saber los resultados a la mayor brevedad posible.
Además, tienes total libertad para elegir el hospital en el que deseas ser atendido. Si tú o algún miembro de tu familia tenéis que ser hospitalizados, estaréis mucho más tranquilos y cómodos porque las habitaciones son individuales y cuentan con una serie de servicios adicionales, tanto para el propio enfermo como para los acompañantes.
Gracias al seguro de salud puedes disfrutar de la mejor atención dental. Hay que tener en cuenta que la gran mayoría de tratamientos, tanto para adultos como para niños, no están cubiertos en la sanidad pública.
Cabe destacar que los centros privados ponen a disposición de los pacientes los tratamientos médicos más innovadores.
Y, por último, si tú y tu familia soléis viajar con frecuencia, gracias a la póliza privada tendréis cubierta la atención internacional. Por supuesto, aunque el seguro privado lo contrates en tu ciudad, podréis recibir atención médica en todo el territorio nacional.
Aunque a priori contratar un seguro de salud pueda parecerte un gasto extra, debes verlo como una inversión.
