Al adquirir una propiedad, es fundamental considerar la contratación de un seguro de hogar. Esta póliza ofrece protección para varios aspectos de la vivienda, abarcando desde la estructura y los electrodomésticos hasta los objetos personales, salvaguardándolos de eventos imprevistos como roturas de tuberías o robos. Su propósito principal radica en resguardar al titular del seguro de posibles pérdidas económicas derivadas de estas situaciones.
En Generación Plus, como correduría de seguros, nos dedicamos a encontrar la oferta más adecuada para cada individuo, adaptándonos a sus necesidades y circunstancias personales. Este tipo de seguro puede cubrir tanto el continente como el contenido de la vivienda, así como la responsabilidad civil. El continente hace referencia a la estructura del inmueble, mientras que el contenido incluye todos los objetos y pertenencias dentro del hogar. La responsabilidad civil, por su parte, ampara los gastos y posibles indemnizaciones por daños a terceros.
Coberturas básicas del seguro de hogar
Las coberturas básicas de un seguro de hogar ofrecen protección ante distintos eventos:
- Daños por agua: Incluyen la reparación de tuberías y la reposición de bienes dañados a causa de roturas o filtraciones.
- Daños eléctricos: Protegen ante variaciones de tensión o cortocircuitos.
- Incendios y caída de rayos: Cubren los daños materiales derivados de estos eventos, incluyendo gastos de desescombro y extinción del fuego.
- Fenómenos atmosféricos: Ofrecen protección frente a eventos como inundaciones y granizadas, con condiciones específicas según la póliza.
- Robos y hurtos: Incluyen la sustracción de bienes, daños por robo, hurto y la reparación/reemplazo de cerraduras.
- Responsabilidad civil: Esencial, ya que cubre daños materiales y personales a terceros, además de la defensa jurídica y posibles indemnizaciones.
Las coberturas de los seguros de hogar básicos suelen tener exclusiones importantes. En general, no cubren los daños provocados por la falta de mantenimiento en la vivienda o los accidentes causados por fumar, como los incendios relacionados. Además, no suelen incluir la reposición de joyas, obras de arte u otros artículos de alto valor a menos que se hayan declarado previamente en la póliza.
Aunque estos seguros proporcionan un amplio abanico de coberturas fundamentales, es vital tener en cuenta sus limitaciones específicas. Es esencial revisar minuciosamente los términos y condiciones de la póliza para comprender qué aspectos están contemplados y cuáles no. Esto incluye conocer las condiciones particulares aplicables a cada situación.
Por supuesto, hay que declarar y asegurar adecuadamente los bienes de valor especial. Algunos artículos pueden requerir una cobertura adicional o una póliza específica para garantizar su protección en caso de cualquier percance o incidente, como las joyas o las obras de arte.
Exclusiones
A pesar de que una póliza multirriesgo ofrece una cobertura muy amplia, existen exclusiones importantes que es crucial conocer de antemano. La distinción principal entre una póliza multirriesgo y una básica radica en la inclusión de fenómenos meteorológicos, cubriendo daños causados por vientos de hasta 120 kilómetros por hora, nevadas y lluvias.
Sin embargo, incluso con la póliza multirriesgo, hay limitaciones, por ejemplo, no cubre los daños en bienes ubicados al aire libre, como el mobiliario de jardín. La cobertura de fenómenos meteorológicos se activa únicamente si, debido al temporal, se han sufrido daños en el interior del hogar.
Es esencial tener en cuenta que si los daños resultan de un descuido, como dejar una ventana o puerta abierta, o si estas tienen un cierre defectuoso, la compañía aseguradora no se responsabiliza de los mismos. En relación a las inundaciones ocasionadas por lluvias torrenciales, se consideran un riesgo extraordinario y están cubiertas por el Consorcio de Compensación de Seguros, no por la póliza multirriesgo.
