Cuando un padre o una madre “abandona” a su familia, en muchos casos surgen numerosos problemas económicos. Según un informe reciente publicado por UNESPA, el seguro de vida resuelve anualmente el futuro de 25.000 familias en nuestro país, nada más y nada menos. Por lo tanto, contratar este tipo de póliza supone un gran acto de generosidad hacia las personas que más te importan.
¿Cómo contratar un seguro de vida?
Estos son los principales aspectos que debes tener en consideración a la hora de contratar un seguro de vida.
Coberturas
- Fallecimiento: el fallecimiento es la cobertura básica del seguro de vida. Por lo tanto, si falleces, ya sea por accidente o por enfermedad, la compañía se encargará de pagar la indemnización al beneficiario.
- Invalidez: si como asegurado sufres una invalidez total y permanente que te incapacita de tu trabajo habitual, recibirás una indemnización de la compañía aseguradora. En este caso la modalidad es opcional, de manera que puedes elegir contratarla o no.
- Enfermedades graves: cuando contratas un seguro de vida tienes la posibilidad de incluir esta cobertura. De esta manera, si te diagnostican una enfermedad grave, como un infarto de miocardio o una insuficiencia renal, por ejemplo, cobrarás una indemnización.
- Dependencia: si por cualquier motivo quedas en situación de dependencia y no puedes valerte por ti mismo, también tienes derecho a recibir una indemnización. Del mismo modo que la invalidez y las enfermedades graves, es una modalidad opcional.
Beneficiarios
Uno de los aspectos más relevantes a la hora de contratar un seguro de vida es el de nombrar a uno o varios beneficiarios. Serán ellos quienes en el momento en el que tu fallezcas cobren la indemnización de la compañía aseguradora.
Capital a asegurar
Por supuesto, debes calcular el capital a asegurar en función de cuáles sean las necesidades concretas de tu familia. No es una tarea sencilla, de manera que puedes pedir ayuda a tu compañía aseguradora. Por lo general, se tienen en cuenta dos factores.
Por un lado, en relación a los hijos, tanto el número como las edades, sobre todo si son menores de edad. Por otro lado, la situación económica de la familia y los gastos fijos que debe afrontar mensualmente: hipoteca, centro educativo… De esta manera puedes hacer un cálculo aproximado del dinero que van a necesitar si tú falleces.
Puedes revisar cada cierto tiempo tus necesidades y las de tu familia. Por ejemplo, si aseguras un determinado capital porque estáis pagando un préstamo hipotecario, en el momento en el que la deuda quede saldada, puedes actualizar el seguro de vida.
Reconocimiento médico
Y, por último, cabe señalar que en función de la edad o del capital a asegurar, tu compañía aseguradora puede exigirte un reconocimiento médico. En este caso, en primer lugar debes responder a un cuestionario en relación a tu estado de salud. Como resulta lógico, debes responder a todas las preguntas de forma sincera, y explicar si sufres alguna enfermedad. Si mientes y la aseguradora lo descubre, podrá negarse a pagar la indemnización a los beneficiarios si falleces.
No olvides que a lo largo de la vida pueden surgir multitud de imprevistos, más allá del fallecimiento. Por esta razón, la contratación de una póliza con las coberturas básicas y opcionales es 100% recomendable. Es la mejor forma de garantizar la seguridad de unos ingresos para ti y para tu familia.
En Generación Plus somos una compañía aseguradora en la que te hablamos de tú a tú. No somos un robot comparador, sino un equipo de personas dispuestas a ayudarte a ti y a tu familia.